2012-04-06

Murió Mario Upegui, uno de los clásicos comunistas colombianos que fuera alumno de Camilo Torres

MARIO UPEGUI, como lo recordamos en la Casa de Cultura en el barrio Policarpa
que él estaba dispuesto a dar su vida cuando centenares de colombianos sin techo tomaron
el terreno diez cuadras de la casa presidencial. FOTO: DICK EMANUELSSON.





Murió Mario Upegui, uno de los clásicos comunistas colombianos  que fuera alumno de Camilo Torres

Por Dick Emanuelsson


TEGUCIGALPA / 2012-04-05 /  Ser comunista colombiano es vivir siempre sobre el filo de la navaja, sintiendo a cada paso, el roce de la vida y de la muerte.
Un comunista que asuma su papel de líder, prácticamente está firmando su propia muerte, las estadísticas colombianas así nos lo confirman.
Mario Upeguí fue uno de esos personajes y ya no está entre nosotros. Murió ayer a los 76 años después de una larga enfermedad. Un hombre que según los parámetros que estableció el terrorismo de estado en su tierra, debería haber muerto hace rato como los miles de camaradas tanto del PCC como de la Unión Patriótica, pues fue uno de los fundadores.
No voy a mencionar todos sus cargos, no fue eso lo que llenaba de orgullo a este hombre que jamás se sintió importante y se mantuvo fiel a sus raíces entrelazadas entre el pueblo trabajador.  Recuerdo que lo conocí en  el mes de marzo de 1988; lo entrevisté mientras recorríamos el barrio de Policarpa y él me iba relatando que por fin la alcaldía o el ministerio de educación –para ser sincero debo decir que no recuerdo que institución estatal era- había entregado el presupuesto para construir, en ese barrio distante a diez cuadras de la casa presidencial, un colegio de cinco pisos al lado de la Casa de Cultura.
Casa en cuyas paredes podían verse grandes cuadros de Bolívar, el Che, Fidel, Lenin, Marx pretendiendo crear conciencia política en el barrio.

1988: Elecciones municipales y departamentales. De la izquierda;
El legendario secretario general del Partido Comunista, Gilberto
Vieira, el presidente de la Unión Patriótica Bernardo Jaramillo,
asesinado el 22 de marzo de 1990 y Mario, con uno de sus
centenares de sombreros, vienen para votar en el barrio Policarpa

EL TRABAJO PARA UNA CASA DIGNA para los trabajadores colombianos fue una de las tareas primordiales que sentía, debían cumplirse, en comunión con las decisiones del partido. Nunca actuó por sí sólo, era un convencido que sin base política y organización no se produce nada. Sus criterios lo convirtieron en uno de los líderes naturales para dirigir la legendaria PROVIVIENDA, organismo creado por el Partido Comunista Colombiano que logró construir más de 200 barrios en el territorio nacional. Ese fue su reto contra las constructoras mafiosas que en unidad con los políticos oligarcas tantas veces engañaron a los colombianos, invitándolos a invertir en vivienda generando montones de sueños truncados, como por ejemplo cuando levantaron barrios sin agua potable o sin salida cloacal.
Los ojos de Mario brillaban cuando me contaba  lo sucedido en  la Semana Santa de 1966, cuando las mujeres comunistas se enfrentaron con la policía y el ejército, con baldes de agua hirviendo. La fuerza represiva estaba allí para aplastar y desalojar a centenares de familias que habían colocado palos y plástico negro haciendo de techo, en la toma de los terrenos que sería luego el barrio Policarpa, en Bogotá, diez cuadras de la Casa Presidencial.
Ese fue el barrio más comunista de Colombia, como decían los oligarcas con odio pero también con temor y respeto en la voz porque conocían el tesón de esa gente.

En la localidad de Sumapaz, Distrito No. 20 de Bogota, fue alcalde Mario 2004. No era
para menos ya que es una bastión de la Unión Patriótica y Partido Comunista Colombiano
que tienen aproximadamente 95 por ciento de los votos en esta región en donde la guerrilla
de las FARC tienen profundas raices e impuso, por falta de voluntad del estado, una
reforma agraría, impidiendo la concentración de la tierra en las manos de los terratenientes.
Uribe, con sus Batallones de Alta Montaña, intentó de derrotar la guerrilla pero en vano.
FOTO: DICK EMANUELSSON.

ME CONTÓ MI VIEJO AMIGO, compañero y colega Álvaro Angarita, ex periodista del semanario VOZ (órgano central del PCC) que Mario Upegui aprendió a leer y escribir gracias a Camilo Torres, el cura que posteriormente fue guerrillero y murió en su primer combate el 15 de febrero de 1966.
A los 13 o 14 años Mario lo acompañó como  guardaespaldas  y así comenzó su vida revolucionaría. Dedicado a la causa popular y para cimentar las piezas para la Revolución que soñó tanto Camilo Torres, como Mario Upegui, siguió su lucha consecuente hasta sus últimos minutos de vida. Casi nunca faltaba Mario en los eventos y homenajes anuales en Bogota a su mentor. Y muchas veces fue uno de los principales oradores.


LA VOZ DE MARIO TENÍA FUERZA, más de un militar habrá sentido envidia por ese tono marcial pero con tremendo contenido de clase. Fue un agitador clásico que conmovía a las masas, lejos de ser  demagogo o populista, sino por poder entablar una relación que surgía como producto de las mismas luchas por una vida y un estado nuevo. Porque eran las mismas raíces de la clase obrera, pobre y explotada por una oligarquía militarista, clasista e intolerante, las que formaban el pensamiento comunista que Mario nunca dejó.
Los comunistas y el pueblo trabajador, no sólo en Bogotá sino en toda Colombia, están de luto. El mismo luto que hoy llevamos quienes tuvimos la honra de conocerlo, pero no hay lugar a lágrimas ni a tristezas. Diremos, como el mismo decía ante las tumbas de tantos camaradas que entregaron sus vidas en aras del mundo mejor:
¡´´NI UN MINUTO DE SILENCIO, TODA UNA VIDA DE COMBATE´´!
¡¡¡¡CAMARADA MARIO UPEGUI, HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!!!!

2012-01-18

Colombia: Torturado y asesinado por el ejército el dirigente campesino del Sumapaz, Víctor Hilarión


Otra vez llegan los reportes sobre asesinatos de líderes campesinos en Sumapaz, la combativa localidad No 20 de Bogota, bastión de la izquierda y del partido comunista colombiano que generalmente gana 90 por ciento en las elecciones.
Esta vez es “torturado y asesinado por las tropas oficiales del ejercito nuestro compañero, amigo y familiar Víctor Manuel Hilarión Palacios, residente de toda su vida en San Juan de Sumapaz. Ayer objeto de montajes y detenciones en donde la justicia lo declara inocente, hoy es víctima de la política de “prosperidad democrática”, dice un comunicado de varias organizaciones populares de la región.
Claro, el Estado Terrorista de Colombia no perdona que estos campesinos organizados, apoyados por el Partido Comunista Colombiano (PCC) y la insurgencia de las FARC-EP en la década de 60´ y 70´ realizaron lo que el estado no era capaz de hacer; una reforma agraria parcelaria en donde prácticamente fue erradicado el latifundismo en el departamento de la capital de la republica.
Y el panorama no daba otra alternativa, por que ante los latifundistas y terratenientes que cortaron las cabezas de los campesinos que se atrevieron de mencionar la palabra “reforma agraria”, el pueblo trabajador del campo se levantó. Y ante el hecho que el terrateniente colocó la cabeza cortado del campesino en un palo del potrero como advertencia a otros campesino “rebelde”, los campesinos de Viotá, Cabrera o Sumapaz se organizaron aún más y mejor, creando la alianza estratégica con la guerrilla para hacer frente a los asesinos del pueblo.
En junio de 2003 hice el último reportaje en Sumapaz, en donde los campesinos y sus hijos relataron como la tropa oficial del ejército bajo órdenes de Uribe, desnudaron en tormenta de nieve a los campesinos, torturándoles así para que diera el paradero de los frentes guerrilleros en la región. En los siguientes enlaces puedes leer o escuchar los testimonios de los habitantes que no se ha dejado de vencer por el Terrorismo de Estado:


Dick Emanuelsson



TERRORISMO DE ESTADO: Asesinado otro campesino en Sumapaz, afiliado a
la organización FENSUAGRO, que ha perdido varios miles de afiliados,
víctimas por la oligarquia colombiana sangrienta.


Colombia: Torturado y asesinado por el ejército el dirigente campesino del Sumapaz, Víctor Hilarión

Por CLOC - por FENSUAGRO/ PARTIDO COMUNISTA COLOMBIANO/Vía Campesina/ MOVICE/ 
Martes, 17 de Enero de 2012 
Torturado y asesinado por las tropas oficiales del ejercito que opera en el páramo de Sumapaz, nuestro compañero, amigo y familiar Víctor Manuel Hilarión Palacios, residente de toda su vida en San Juan de Sumapaz. Ayer objeto de montajes y detenciones en donde la justicia lo declara inocente, hoy es víctima de la política de “prosperidad democrática”
Martes 17 de Enero de 2012
La organización agraria de Sumapaz, nuevamente conmovida y adolorida por los hechos luctuosos ante los crímenes atroces cometidos por las fuerzas militares en contra de la población civil e inerme en la región; denuncia ante la opinión pública regional, nacional e internacional, ante las autoridades y organismos defensores de los derechos humanos y ante los medios de comunicación:
Que hemos iniciado el año ante otro hecho de violencia y crimen excecrable, cuando el pasado martes 10 de enero de 2.012, es torturado y asesinado por las tropas oficiales del ejercito que opera en el páramo de Sumapaz, nuestro compañero, amigo y familiar Víctor Manuel Hilarión Palacios, residente de toda su vida en la vereda y centro poblado de San Juan de Sumapaz; quien el día lunes 9 se había dirigido en un viaje propio de la actividad agraria, hacia las veredas de la cuenca del Río Nevado jurisdicción del municipio de San Luis de Cubarral, Meta, comunidad de “La Totuma” vecina de la localidad 20 del DC- Sumapaz.
El cuerpo sin vida de nuestro entrañable compañero es hallado en las instalaciones del CTI en la ciudad de Villavicencio, ante la búsqueda por parte de la familia y de la organización agraria; el cadáver con signos visibles de tortura en donde se muestra la capacidad criminal de los miembros de la fuerza pública, amparados por la nefasta política de esta institución con las ejecuciones extra judiciales mal llamados “Falsos Positivos”.
Víctor Hilarión nacido, criado y establecido y como afiliado a la organización agraria, comunal y educativa, participante en la actividad comunitaria y social como productor y expositor en las ferias agroambientales, padre de una menor y protector de su señora madre de avanzada edad, agricultor, ganadero y cultor del adiestramiento de los equinos, caballista y arriero.
Conocedor y dedicado al oficio de la arriería en las demandas de cosecha y movimiento de carga por los caminos de herradura en los municipios de Cabrera, San Bernardo, Pasca, Alto Duda en La Uribe, Meta, cuenca del Nevado San Luis de Cubarral, Meta, actividad extensiva al páramo en Guamal, Meta, Gutiérrez, Cundinamarca y Corregimientos de San Juan, Nazareth y Betania en Sumapaz DC.
Ayer objeto de montajes y detenciones en donde la justicia lo declara inocente, hoy es víctima de la política de “prosperidad democrática” y pretenden hacerlo ver como otro caído en combate para entregarlo y recibirlo como trofeo macabro para las tropas que llenan de fuego, sangre y terror a la región y al país.
Hacemos un llamado a la movilización y a la denuncia por parte de la comunidad y de sus organizaciones, una exigencia a las instituciones del estado para que se investigue y castigue a los autores de tan atroces crímenes y confiamos en la comunidad internacional todos sus oficios para que se investigue, castigue y exija al gobierno colombiano el cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario.
SINDICATO DE TRABAJADORES AGRARIOS DEL SUMAPAZ- SINTRAPAZ -FENSUAGRO
ORGANIZACIÓN FEMENINA
JUNTAS DE ACCIÓN COMUNAL
PARTIDO COMUNISTA COLOMBIANO - ZONAL SUMAPAZ
San Juan de Sumapaz, 14 de enero de 2012


Sumapaz, tierra de luchas campesinas






Sumapaz, tierra de luchas campesinas

¡“Feliz viaje a Casa Verde, Camarada”!

POR DICK EMANUELSSON


SAN JUAN DE SUMAPAZ / 030619 / El frío es cruel, es lo primero que pienso cuando miro por la ventana del carro, a los paisajes hermosos. La altura, 3.600 metros de la cordillera central de los Andes es una hermosura. Muchachos de 18-25 años, integrantes de los batallones de contraguerrilla caminan encapuchados (contra el frío) por la carretera, en camino a una misión.
Por la misma carretera anduve 15 años atrás. Esa vez, el destino era Casa Verde, la base central de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, las Farc-EP. En esa época, el año -88, la guerrilla y el gobierno todavía mantenía un acuerdo de cese de fuego, firmado en mayo del 1984 entre el presidente Belisario Betancourt y el comandante guerrillero, Manuel Marulanda Vélez.


Me acuerdo que me impacté por la belleza de esta tierra de Sumapaz durante las tres jornadas de caballo que tenia que hacer. También me acuerdo el espanto que sentía el primer día y la primera vez en mi vida que tuvo que montar un caballo que me iba a llevar al campamento guerrillero. Partí con el caballo de la Localidad 20, que es el pueblito de San Juan de Sumapaz, y cuando llegué a la orilla de la bajada no pude creer lo que vi, que allá, unos mil metros abajo, iba yo montado en un caballo.
El caballo hizo vuelta con su cabeza y me miró, consciente de mi inseguridad y se paró no más. No se movió, y yo, feliz que el caballo no quiso ir más, comencé de bajar en pie hacia el fondo de la quebrada. De repente apareció un campesino atrás con diez mulas cargadas con sacos de maíz, trigo y harina, y me preguntó: ¿“Qué pasó?” y le conté que el Caballo (sic!) no quería bajar. El campesino se rió, consciente que no era el caballo que era el cobarde sino el rubio, o mono como dicen en Colombia.

“Camarada, me dijo, móntese el caballo no más, esto si tiene arreglo”.
Monté otra vez el caballo, sospechando lo peor. Y una vez sentado, el campesino me gritó: “Feliz viaje a Casa Verde, Camarada”! y pegó el caballo mío con un lazo. La bestia fue bestial conmigo los mil metros hacia la profundidad que pensé llegaría masacrado.
Fue la primera y divertida, ahora sí, experiencia de San Juan de Sumapaz.
15 años después, me río cuando me acuerdo ese día fatal a final del marzo, cuando se iba a reunir la segunda cumbre de la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar, constituida por las Farc, Eln, Epl, Quintín Lame y Prt.
No era casual que el lugar por la cumbre fue el páramo de Sumapaz. Aquí, la guerrilla de las Farc mantenía un fuerte control desde el 1966, cuando se quedó la base central del Secretariado de la organización insurgente. Estos 16.000 kilómetros cuadrados, solamente dos horas de viaje de Bogota, donde cuatro departamentos, Huíla, Cundinamarca, Tolima y Meta se juntan, también funcionó como corredor para la guerrilla de los departamentos y frentes de guerra en el sur y del este de Colombia. Era, como escribía El Tiempo el 23 de octubre 2000, “una punta de lanza hacia Bogotá”, por que queda a ‘tiro de fusil’ por la cercanía a la capital.
En esos días del octubre el año 2000, 4.000 hombres de las Fuerzas Militares capacitados para operaciones de alta montaña, con el apoyo de helicópteros artillados, tanques cascabel y artillería pesada, realizaron desde principios de septiembre la ‘Operación Aniquilador II’.
Desde esos días, las Fuerzas Militares han consolidado su presencia en esta tierra historia con luchas campesinas desde la década del -30, construyendo una base de alta montaña. Los combates han sido duros pero la fuerza militar se ha quedado.

TROPAS GUERRILLERAS de las FARC-EP en la Cordillera Oriental de los Andes.

El ejercito había intentado de recuperar esta gran zona ya el 9 de diciembre del 1991, cuando el presidente Cesar Gaviria ocupó Casa Verde. Los combates fueron duros y varios aviones Mirage y helicópteros fueron derribados. En poco tiempo la guerrilla recuperó el terreno.
Pero a parte la victoria militar Phyrrus, la gran derrota fue política, ya que las Farc no solamente pudo recuperarse de la perdida de Casa Verde, sino que triplicó sus combatientes durante la década -90. Gaviria, que rompió el acuerdo de cese de fuego el mismo día cuando los colombianos se fueron a las urnas para elegir una constituyente, terminó muy desprestigiado por haber perdido una oportunidad de llegar a un proceso de paz profundo y real. ¿Cuantos muertos no se había podido evitar en esta guerra?
Al mismo tiempo se intensificaba la persecución de la organización política que había nacido por el cese de fuego entre las Farc y el presidente Betancourt, la Unión Patriotica (UP). Hoy, 18 años después su nacimiento, son más de 4.000 los asesinados de este movimiento que fue una alternativa política al bipartidismo liberal y conservador en esos años, pero que fue enterrado sistemática y físicamente por el poder reinante.

Militante de la Unión Patriótica, víctima por el Estado Terrorista
Colombiano. FOTO: VOZ.

Pero San Juan de Sumapaz, a pesar la tremenda militarización en que se vive, sigue siendo pero muy rojo. A pesar el pequeño poblado fue militarizado tres días antes las elecciones municipales y regionales el 26 de octubre del 2000, en la Localidad 20 del distrito del Usme, Bogota, los campesinos mostraron su verdadero color político.
En un reportaje que hizo el enviado especial de El Tiempo por esos días, reportó, impactado, que ahí, los campesinos no dejan su voto bajo el retrato del presidente, ese año Andrés Pastrana, sino bajo un cuadro grande de Ernesto Che Guevara. El dominio del Partido Comunista es total. De los 608 personas registradas para votar, la UP obtuvo 586 de los 597 sufragios, es decir, más de 96 por ciento de los votantes.
Con razón los militares, llegados tres días antes a San Juan de Sumapaz, vieron los campesinos con sospecha. Y vice versa. Pero el estado trató de calmar los nervios y las sospechas, diciendo, que la reconquista estatal de Sumapaz, que constituye varios municipios como San Bernardo, Cabrera, Venecia, Nazaret y Gutiérrez entre otros, llegaría con obras sociales.
Un asesor de las Fuerzas Militares afirmó al enviado de El Tiempo, que en el Sumapaz no se presentarán problemas con la población, pues “LOS SOLDADOS TIENEN INSTRUCCIONES DE BUEN TRATO Y LOS COMBATES SE HAN PRESENTADO EN LUGARES DESCAMPADOS, DONDE NO HAY NÚCLEOS DE POBLACIÓN”.
Lo decía en octubre del año 2000. Ahora, cuando entro al San Juan de Sumapaz, casi tres años después, los campesinos me esperan con sus testimonios que no confirman las palabras del asesor militar. Cuentan como son desnudados en 4.000 metros en el páramo de Sumapaz, soportando y congelándose en grados bajo cero en tormentas de nieve o de fuerte lluvia y vientos de los Andes. Cuentan, como militares interrogan niños separados de sus padres en el mismo páramo, preguntando si “tus tíos y primos llevan la misma ropa como nosotros”, es decir, camuflaje verde.
Paso por tres retenes militares donde el control es más restringido que cualquier control de los aeropuertos. Me sacan todos los datos y terminan sacándome una fotografía para el registro. Pero el trato, hacia un corresponsal extranjero es amable pero con tono de extrañeza, o como dijo un teniente: ¿“Y por qué venir a pasar frío”?
Sumapaz es, para darles unos datos históricos, zona de fuerte luchas campesinas, por la tierra y por la reforma agraria. Ha sido una lucha exitosa, donde el socialista Erasmo Valencia, ya en la década -30 dirigió a los campesinos de la región contra los terratenientes. En nuestro camino hacia Sumapaz, también se puede observar la cárcel que creyó el golpista y general Gustavo Rojas Pinilla, destruida hace varios años, pero donde fueron ubicados miles de presos políticos.

Juan de la Cruz Varela
Pero el verdadero dirigente campesino de Sumapaz fue Juan de la Cruz Varela, primero dirigente liberal, como Manuel Marulanda, pero posteriormente líder comunista.
En realidad Varela fue la persona que creó el espacio para la creación de los primeros núcleos en los años 1955-56 de la guerrilla campesina que en el 1964 fue fundada como las Farc.
Ahora escuchamos a los campesinos en nuestra serie sobre las violaciones de los derechos humamos en Colombia.

AUDIO: http://www.box.com/s/vpx609uhbopvurqsb0uo